– Ordené proustificar el automóvil
– No me digas
– Te explicaré cómo se construye una limusina extralarga. Toman la unidad de base del vehículo en cuestión y la parten por la mitad con un instrumento enorme, como un serrucho de precisión. Añaden entonces un segmento para darle al chasis y a la carrocería la longitud que se desee, que puede ser tres metros, tres metros y medio, cuatro metros mayor de lo habitual. Se le da la dimensión que se desee. Hasta seis metros más larga si quieres. Mientras hacían esta operación en mi automóvil, indiqué que lo proustificaran, que lo insonorizaran con paneles de corcho para protegerlo del ruido de la calle.


(Cosmópolis, de Don DeLillo))